Pienso que estamos inmersos en un espacio-tiempo reticular microscópico
multidimensional, que a su vez está compuesto por líneas de fuerza (¿elec-
tromagnéticas?) que se cruzan formando los retículos.
También pienso que de la unión-deformación de varios vértices o puntos de
cruce ( deformación microscópica y puntual del espacio-tiempo) se genera
o nace la materia. En ese instante pasa a ser medible y detectable por nosotros,
mientras que la supuesta malla energética no la detectamos.
El primer problema que surge es que dicha materia ( deformación visible y
puntual del espacio-tiempo ) estaría atrapada en la malla espacio-temporal
sin posibilidad de movimiento.
Pero ¿qué pasaría si dicha deformación o nudo se deshiciera a la vez que se
formara en el siguiente vértice?. Al igual que se iluminan y apagan los
puntos de una pantalla de televisión generando movimiento.
La siguiente cuestión que me planteé es ¿por qué cuando analizamos un
átomo no vemos las líneas energéticas constitutivas de la malla espacio-
temporal?.
Simplemente, porque dichas líneas de fuerza son multidimensionales. Solo
apreciamos tres de sus dimensiones.
Al igual que si nosotros fuéramos seres de dos dimensiones y nos mostrara
la punta de un cable tridimensional, por muchas vueltas que le diéramos
veríamos solamente el núcleo de cobre y una corteza plástica.
Igual nos sucede con el átomo: vemos el núcleo y una corteza de electrones,
pero no vemos que realmente sea una sección de una línea de fuerza o de
energía.
Así pues, cuando los científicos rompen el núcleo de un átomo, lo que están
haciendo realmente es deshilachar una “cuerda” multidimensional.
Otra consecuencia de esto, si se llega a comprobar, es que las ondas hertzianas
no se desplazan en el vacío. Debido a que la velocidad de propagación es
constante (300.000 km/s); independientemente de la frecuencia que emitamos,
estaríamos ante un medio homogéneo con un alto coeficiente de elasticidad.
Finalmente, un planeta o una estrella no son un cúmulo de materia que deforman
el espacio-tiempo sino un cúmulo de deformaciones microscópicas del propio
espacio-tiempo.
José Mª Ruiz josemariacarpintero@gmail.com
martes, 3 de febrero de 2009
Universos paralelos
En cuanto a mi teoría sobre el espacio-tiempo y su relación con la materia, tengo algunas ideas que aún no he puesto por escrito:
Pienso que vivimos en un universo multidimensional compuesto a su vez por universos paralelos tridimensionales.Esta afirmación explicaría muy sencillamente la causa de la contracción y la expansión de nuestro universo. ¿Cómo?. Pues muy sencillo, cuando nuestro universo se expande está obligando a universos paralelos contiguos a contraerse. Cuando algún universo contiguo se contraiga al máximo y se colapse provocando un big-ban, a su vez obligaría a nuestro universo a comenzar su contracción.
Una idea que se deriva de mi teoría espaciotemporal es que los agujeros negros serían simplemente una ruptura de la maya espaciotemporal debido a las fuertes tensiones provocadas por la materia densa. Claro, rápidamente me dirías que si la maya está rota,dentro del agujero negro habría un auténtico vació. Vacío que quizás se llene de la maya del universo paralelo contiguo. De aquí se podría deducir que si queremos viajar a trabes de un agujero negro, lo tendríamos que hacer justo por el centro, donde se compensarían las fuertes fuerzas gravitacionales de los bordes actuando como un verdadero ojo de huracán.
De mi teoría espaciotemporal y de la dependencia de la materia de la maya, se puede deducir también que las partículas subatómicas obtenidas en los aceleradores de partículas pueden ser fruto del rebote de la maya espaciotemporal. De ello se derivaría su efímera vida. Los mismos resultados podríamos obtener con un generador de pulso magnético de elevada potencia pero con unos costes ridículos comparativamente hablando.
Como no te quiero aburrir con mis teorías de física cuántica y con mis viajes ínter dimensionales, te comentaré unas ideas originales para hacer fusión de hidrógeno.
Comencemos con la teoría:
La ciencia oficial nos dice que la fusión de los núcleos de H en el Sol se debe a la gran presión y a la gran temperatura que allí se dan debido a las fuerzas gravitacionales, venciendo las fuerzas repulsivas de los núcleos. Presión y temperaturas necesarias para que se dé la reacción en cadena. Condiciones difíciles o imposibles de reproducir en la Tierra.
Aquí aparece mi genial idea: ¿Y si la presión y la temperatura que existen en el Sol realmente lo que provocan en el núcleo de hidrógeno no fuera otra cosa que la variación de la frecuencia vibratoria? ¿Y si de la frecuencia vibratoria surgiera su fuerza repulsiva?.
Si las respuestas a estas preguntas fueran afirmativas nosotros podríamos interferir en la frecuencia vibratoria del núcleo de H influyendo a su vez en la fuerza repulsiva del núcleo. Tendríamos la llave de la fusión del H. A esta frecuencia vibratoria distinta de la natural, la he bautizado como FRECUENCIA DE FUSIÓN. Esta F.F sería distinta para cada elemento de la tabla periódica y quizás se pudiera obtener sumando una constante a la frecuencia de resonancia.
Todo esto se puede realizar con unos sencillos generadores de radiofrecuencia. Uno de ellos sintonizado a la frecuencia de resonancia del H para obtener plasma , y con el otro generador hacer un barrido en frecuencias muy cercanas a la de resonancia.
Un saludo: José Mª Ruiz josemariacarpintero@gmail.com
Pienso que vivimos en un universo multidimensional compuesto a su vez por universos paralelos tridimensionales.Esta afirmación explicaría muy sencillamente la causa de la contracción y la expansión de nuestro universo. ¿Cómo?. Pues muy sencillo, cuando nuestro universo se expande está obligando a universos paralelos contiguos a contraerse. Cuando algún universo contiguo se contraiga al máximo y se colapse provocando un big-ban, a su vez obligaría a nuestro universo a comenzar su contracción.
Una idea que se deriva de mi teoría espaciotemporal es que los agujeros negros serían simplemente una ruptura de la maya espaciotemporal debido a las fuertes tensiones provocadas por la materia densa. Claro, rápidamente me dirías que si la maya está rota,dentro del agujero negro habría un auténtico vació. Vacío que quizás se llene de la maya del universo paralelo contiguo. De aquí se podría deducir que si queremos viajar a trabes de un agujero negro, lo tendríamos que hacer justo por el centro, donde se compensarían las fuertes fuerzas gravitacionales de los bordes actuando como un verdadero ojo de huracán.
De mi teoría espaciotemporal y de la dependencia de la materia de la maya, se puede deducir también que las partículas subatómicas obtenidas en los aceleradores de partículas pueden ser fruto del rebote de la maya espaciotemporal. De ello se derivaría su efímera vida. Los mismos resultados podríamos obtener con un generador de pulso magnético de elevada potencia pero con unos costes ridículos comparativamente hablando.
Como no te quiero aburrir con mis teorías de física cuántica y con mis viajes ínter dimensionales, te comentaré unas ideas originales para hacer fusión de hidrógeno.
Comencemos con la teoría:
La ciencia oficial nos dice que la fusión de los núcleos de H en el Sol se debe a la gran presión y a la gran temperatura que allí se dan debido a las fuerzas gravitacionales, venciendo las fuerzas repulsivas de los núcleos. Presión y temperaturas necesarias para que se dé la reacción en cadena. Condiciones difíciles o imposibles de reproducir en la Tierra.
Aquí aparece mi genial idea: ¿Y si la presión y la temperatura que existen en el Sol realmente lo que provocan en el núcleo de hidrógeno no fuera otra cosa que la variación de la frecuencia vibratoria? ¿Y si de la frecuencia vibratoria surgiera su fuerza repulsiva?.
Si las respuestas a estas preguntas fueran afirmativas nosotros podríamos interferir en la frecuencia vibratoria del núcleo de H influyendo a su vez en la fuerza repulsiva del núcleo. Tendríamos la llave de la fusión del H. A esta frecuencia vibratoria distinta de la natural, la he bautizado como FRECUENCIA DE FUSIÓN. Esta F.F sería distinta para cada elemento de la tabla periódica y quizás se pudiera obtener sumando una constante a la frecuencia de resonancia.
Todo esto se puede realizar con unos sencillos generadores de radiofrecuencia. Uno de ellos sintonizado a la frecuencia de resonancia del H para obtener plasma , y con el otro generador hacer un barrido en frecuencias muy cercanas a la de resonancia.
Un saludo: José Mª Ruiz josemariacarpintero@gmail.com
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